DETALLES DEL PASO DE PALIO

Publicado por Gabinete de Prensa viernes, 1 de enero de 2010

El paso de palio de María Santísima de la Concepción, tal y como lo concebimos a día de hoy, ha sufrido una profunda evolución e importante renovación a lo largo de los años.


La imagen de la dolorosa realizó sus primeras salidas procesionales sin el cobijo de un palio, el cual es añadido al conjunto en la Semana Santa del año 1.991 cuando se procede a la adquisición de un juego de doce varales de segunda mano realizados en metal cincelado y plateado a los Hijos de Juan Fernández Gómez en Sevilla.

Dichas piezas se convertirían en las más apreciadas de la composición, ya que el resto de enseres eran de sencilla ejecución atendiendo a las limitaciones económicas que presentaba la Hermandad. El palio primitivo empleaba el color negro corporativo en su totalidad con brocados y flecos en plata, y posteriormente fue sustituido por otro de líneas sencillas en tono azul marino y ornamentos dorados.

Actualmente mantiene el modelo de cajón, con bambalinas bordadas exteriormente en hilo de oro y sedas sobre terciopelo burdeos por parte del taller de la propia Hermandad formado por Dña. Manoli Díaz Sánchez y Dña. Antonia Gil Muñoz bajo el diseño de D. Luís Mañasco Lara. Dichos hermanos comparten además la autoría del juego de corbatas que rematan sus varales así como la Gloria del techo de palio, que reproduce en un lienzo el misterio de la coronación de la Virgen María como Reina del Universo. Los faldones están confeccionados en terciopelo y damasco burdeos con broches de aplicación en sus esquinas, obra del mismo taller.

A partir del año 1.997 comienza un proceso de transformación e innovación en la orfebrería adaptada a un conjunto de líneas neobarrocas con el estreno de los respiraderos que ejecutó en metal cofrade cincelado y bañado en plata por los talleres de Orfebrería Sevillana. Dos años más tarde la Hermandad establece un vínculo laboral y afectivo con el artista sevillano D. Antonio Santos-Rodríguez Campanario, el cual trabaja en su taller prácticamente la totalidad de la orfebrería del palio compuesta por jarras y faroles de entrevarales, faroles de cola, peana y candelería; todo ello en alpaca cincelada, repujada y bañada en plata de ley.